El secretario general del PSOE de Castilla y León (PSCyL), Luis Tudanca, insistió en que el partido “no ha cambiado” su postura en relación a la minería e insistió en que defiende el carbón, las cuencas y las térmicas al tiempo que apuesta por la lucha contra el cambio climático. Por ello, Tudanca explicó que se pretende “pelear” para compatibilizar la directiva europea de lucha contra el cambio climático con una moratoria que permita que las centrales térmicas sigan quemando carbón nacional.
Además de “salvar” las térmicas y el carbón, Tudanca insistió en que se pedirá “de manera complementaria” que se establezca en las subastas de las renovables un compromiso de que “buena parte de esas instalaciones de energías renovables se instalen en las cuencas mineras” con el fin de complementar el empleo en las minas y en las térmicas. “Estamos hablando del presente y del futuro, que es de lo que ha hablado siempre el PSOE”, incidió.
Después del voto del PSOE en el Congreso a favor de adelantar el cierre de las térmicas al año 2020, Tudanca aclaró que esa votación generó “cierta confusión”, parte de la cual asumieron los socialistas, mientras que el resto consideró que fue fruto de “una manipulación interesada y repugnante por parte del PP” que pretendía “tapar” las declaraciones que solo unos días más tarde hicieron el ministro de Energía, Álvaro Nadal, y el comisario europeo del PP, Miguel Arias Cañete, apostando por el fin del carbón y de las térmicas.
Tudanca acusó al PP de ser “los únicos responsables” del fin del carbón y de que “apenas haya 400 mineros trabajando en las cuencas”. En este sentido, el líder de los socialistas en Castilla y León explicó que cuando Herrera llegó a la Presidencia de la Junta, el sector de la minería contaba con 15.000 mineros, una cifra que se situaba en 3.500 profesionales del sector con la llegada de Rajoy al Ejecutivo central y que ahora se limita a 400. “Esta es la política minera del PP”, lamentó Tudanca, quien denunció que los ‘populares’ han venido intentando en los últimos días “generar una polémica y confusión interesada para tapar sus vergüenzas”, insistió.
De cualquier forma, Tudanca consideró que la situación no sería la misma si el proyecto de captura y almacenamiento de CO2 en la Ciuden de Ponferrada (León) puesto en marcha por el Gobierno de Zapatero no hubiera sido “cercenado” por un PP que “nunca creyó en él” y que lo tiene “paralizado” desde hace años, además de que vota en contra “sistemáticamente” de todas las enmiendas a los presupuestos e iniciativas que presenta el PSOE en los diferentes parlamentos.
“Si este proyecto se hubiera seguido desarrollando, hoy estaríamos hablando de tecnologías suficientes para podernos plantear que estos pagos por capacidad, en función de las emisiones máximas que va a exigir la Unión Europea en el marco temporal que se está estableciendo, hubieran podido salvar las térmicas”, añadió Tudanca.
Así lo dijo el líder socialista de Castilla y León tras la reunión mantenida en la localidad leonesa de La Robla con el nuevo secretario general del PSOE del Principado de Asturias, Adrián Barbón, y alcaldes de diferentes localidades mineras de la provincia de León como Villablino, Fabero o La Robla. Barbón consideró que la situación actual en la que se encuentra el sector minero es “consecuencia directa del incumplimiento del Plan del Carbón”.
A juicio del secretario general del PSOE de Asturias, no se está cumpliendo el mix energético que correspondería al carbón nacional, no se está cumpliendo con las inversiones en los municipios mineros ni desarrollando los planes de reactivación en las comarcas mineras. Todo esto lo atribuyó Barbón a “una falta de voluntad política” por parte del PP, ya que insistió en que la postura del PSOE es “una única” y es la definida en el pasado Congreso Federal del partido.
“Somos conscientes de que hay una realidad que no podemos negar, que es que hay una transición energética, y que dentro de ella hay que apostar por la defensa del carbón autóctono como parte fundamental de ese mix energético”, declaró. Tras la reunión mantenida en La Robla, Barbón recalcó la intención de abrir “una línea para ir de la mano” en un aspecto de tanta relevancia para las comarcas mineras de ambas comunidades como la continuidad del carbón y de las térmicas, en especial después de haber asistido en las últimas semanas a “una especie de ceremonia de la confusión”, concluyó.