Nieve, lluvia y viento auguran una jornada para este domingo complicada por el paso de profunda borrasca, bautizada con el nombre de ‘Félix’. El temporal se recrudecerá a con fuertes rachas y precipitaciones que dejarán un manto blanco en las montañas.
Las nueve provincias de Castilla y León se verán afectadas por el rastro de la borrasca, que azota desde este viernes el oeste de la península Ibérica. La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) mantiene activada la alerta naranja por fuertes rachas de viento en la Cordillera Cantábrica de Burgos, León y Palencia.
Entre los 70 y los 80 kilómetros por hora podrían alcanzar las rachas en zonas de nuestra comarca. Las nevadas pueden afectar a zonas de montaña de la provincia de León pudiendo dejar un manto de blanco de 18 centímetros.