El director general de la Fundación Naturgy, Martí Solá, instó hoy a las administraciones a impulsar con ayudas económicas el sector del gas renovable, como se hizo en su día con otras fuentes energéticas como la solar y la eólica, con el fin de lograr que exista una expansión importante, ya que tiene mucho potencial, como vienen demostrando muchos países de Europa donde las plantas de biogás suman 15.000, de las que sólo dos se encuentran en España, en concreto una en Madrid, en Valdemingómez, y otra en Galicia, en As Somozas, La Coruña.
A juicio de Martí Solá, esta energía puede resultar muy rentable, teniendo en cuenta que no depende de la climatología, y que procede de muchas fuentes, para lo que es necesario un impulso para “bajar barreras económicas” e incentivos que logren que el biogás renovable tenga una participación importante en el mix energético. De hecho, el porcentaje que hoy se introduce en la red de distribución no representa el uno por ciento, pese a su potencial y entrar en la economía circular que busca la reducción de desechos, la reutilización de los recursos y cerrar los flujos económicos y ecológicos.
Así lo explicó Martí Solá minutos antes de participara en un seminario organizado por la Fundación Naturgy, en Valladolid, para analizar el papel del gas renovable y la economía circular, donde también se puso de relieve la necesidad de avanzar en la generación de energía a partir de residuos agroganaderos.
En este sentido se pronunció Xavier Flotats, del Departamento de Ingeniería Agroalimentaria y Biotecnología de la Universidad Politécnica de Cataluña (UPC), quien lamentó que la “falta de visión de futuro” en España esté ralentizando el desarrollo del gas renovable. A su juicio, “hace falta voluntad y planes de país, no planes de Gobierno”; planes de futuro a 20 o 50 años vistas, porque los planes a cuatro años no funcionan, dijo.
“Lo que me preocupa es que no hay planes de futuro, no tenemos una normativa que ayude. El coste de producción de energía con biogás para instalaciones pequeñas es superior a otras energías; se necesita ayudas como las hay en Francia, Australia…”, precisó, para exigir medidas que favorezcan su desarrollo y estrategias a largo plazo sobre autosuficiencia energética, lucha contra el cambio climático, gestión de residuos y desarrollo rural.
Por su parte, el director general de Energía y Minas de la Consejería de Economía y Hacienda, Ricardo González Mantero, explicó que en breve arrancará la tramitación de la Estrategia de la Energía Circular, “algo muy necesario” que servirá para diseñar productos que permitan una menor generación de residuos y mayor reciclaje, algo que es “importantísimo”.
González Mantero añadió que en este camino está la Junta, y como dato aportó el ahorro energético con participación de renovables generado en Castilla y León entre 2014 y 2017, con una reducción del 5,6 por ciento de la intensidad energética, al pasar de un consumo de 145 toneladas equivalentes de petróleo por millón de euros de PIB, a 136 toneladas. Esto indica, precisó, que la economía está creciendo pero cada vez con un mayor ahorro de recursos. En este sentido, explicó que el camino está iniciándose y que el futuro pasa por un repunte del biogás en la Comunidad, gracias a la actividad ganadera y la industria agroalimentaria.
En el seminiaro, que forma parte de las actividades de formación y divulgación de la Fundación Naturgy, entre otros, participaron como ponentes el gerente de Estrategia de Accenture, Julio Lequerica; el director de Programas de la Fundación del Patrimonio Natural de Castilla y León, Jesús Díez Vázquez; el director de Relaciones Institucionales de Calidad Pascual, Óscar Hernández; el director general del Grupo Empresarial Huertas, Marcelino Chacón; el director de HTN Biogás, Rubén Rodríguez; el responsable nacional de Desarrollo de Nuevos Negocios de Nedgia del Grupo Naturgy, Francisco Torres; y el profesor titular del departamento de Ingeniería Química y Tecnología del Medio Ambiente de la Universidad de Valladolid Raúl Muñoz.