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El Observatorio Principal de Empleo del ECYL, indica que a finales de agosto el número de personas sin trabajo registradas en la oficina de empleo de Villablino ha disminuido en siete individuos, manteniendo la tendencia a la baja que ya se había observado en los dos meses previos. El total de personas inscritas como solicitantes de empleo asciende ahora a 390. El desempleo también ha bajado en El Bierzo, lo que implica que actualmente, entre ambas comarcas, hay 6.400 personas sin empleo, 208 menos que a finales de julio. En cuanto a la variación interanual, tanto Laciana como El Bierzo han reducido el número de parados. El Observatorio destaca que, a pesar de la reducción de desempleados en Villablino, la situación laboral de la comarca sigue presentando desafíos. A lo largo de los últimos años, el municipio ha experimentado una lenta recuperación en términos de empleo, afectado en gran parte por la progresiva desaparición de la actividad minera, que durante décadas fue uno de los principales motores económicos de la zona. Actualmente, el sector servicios y algunas iniciativas en turismo rural y sostenibilidad intentan dinamizar el mercado laboral, aunque la oferta de empleo sigue siendo limitada.
Muchos jóvenes se ven obligados a emigrar hacia otras áreas en busca de oportunidades laborales, lo que ha contribuido al envejecimiento de la población activa en la zona. Aun así, la tendencia a la baja del paro registrada en los últimos meses, aunque moderada, refleja un cierto optimismo sobre la capacidad de la comarca para adaptarse a las nuevas dinámicas económicas. Expertos advierten que aún es necesario un esfuerzo mayor para diversificar la economía y crear empleos más estables y de calidad en Villablino. Ya son varios los organismos e investigadores de instituciones como la Universidad de León, el Consejo Económico y Social de Castilla y León (CES) y profesionales del propio ECYL (Servicio Público de Empleo de Castilla y León), y por supuesto sindicatos como UGT y CCOO han hecho declaraciones en diversas ocasiones señalando la necesidad de políticas activas de empleo más ambiciosas en zonas afectadas por la desindustrialización, como es la comarca lacianiega.
También han surgido voces dentro de las asociaciones empresariales locales y expertos en desarrollo rural, que insisten en la importancia de atraer inversiones y diversificar la economía para evitar la dependencia de sectores estacionales o de baja cualificación.
Las políticas impulsadas por Yolanda Díaz, como ministra de Trabajo y Economía Social, han tenido un impacto en el mercado laboral en todo el país, incluidas áreas como Villablino y El Bierzo. Hay una voluntad por parte de las políticas ministeriales que dan una sensación de “respiro”. Entre las iniciativas más relevantes, destacan las reformas laborales y las políticas de fomento del empleo estable, que han afectado a regiones que, como Villablino, enfrentan dificultades estructurales por la reconversión industrial y la falta de diversificación económica. Sin ir más lejos, la reforma laboral aprobada en 2021 se centró en reducir la temporalidad y fomentar la contratación indefinida, lo que ha generado una tendencia hacia la creación de empleo más estable, especialmente en sectores como el de los servicios y la agricultura, que son importantes en comarcas como Laciana y El Bierzo. Además, las políticas para aumentar el salario mínimo y mejorar las condiciones laborales también han tenido impacto en las zonas rurales y deprimidas económicamente, donde muchos trabajos eran precarios y mal remunerados. Otro aspecto importante ha sido la promoción de los contratos de formación y la colaboración con las comunidades autónomas para desarrollar planes de empleo específicos, como los orientados a la transición ecológica, lo que podría beneficiar a zonas como Villablino, que busca nuevas vías económicas tras el cierre de las minas.
También, los fondos europeos para la recuperación económica (Next Generation EU) incluyeron partidas para la reactivación del empleo en regiones afectadas por la desindustrialización, lo que puede estar incidiendo en la leve mejoría que se está registrando en Villablino. Sin embargo, algunas voces dentro de los sindicatos locales señalan que, si bien estas políticas han sido positivas, aún son insuficientes en comarcas con problemas estructurales, donde es necesario un plan de empleo a largo plazo y una mayor inversión en diversificación económica y en sectores emergentes como la tecnología. Incluso una apuesta municipal firme por la cultura. Aunque bien es cierto, que su impacto depende de cómo se estructuren las actividades culturales y de su integración con otras áreas económicas, como pueden ser el turismo rural o la promoción del patrimonio histórico.
