La periodista televisiva Giovanna González pregona San Roque

Licenciada en periodismo, en el año 2010, por la Universidad Rey Juan Carlos I. Reportera actualmente en el programa televisivo de Telecinco ‘Socialité’, la lacianiega Giovanna González ha sido la encargada de pregonar las fiestas de San Roque 2022. En casa. En su tierra. Y rodeada de amigos y familiares.

Al filo de la medianoche, en la plaza Luis Mateo Díez de Villablino, la joven echó la vista atrás en el tiempo. Buscó en sus recuerdos y rememoró la ilusión con la que los adolescentes enfrentaban las fiestas. La emoción por ver a los chavales y las chavalas de fuera que visitaban el pueblo. El “subidón” de conocer el programa de San Roque y buscar en él la página de los conciertos. O el desfile de carrozas “esas camisetas que al escurrirlas salían cuántos tipos de bebida diferentes”.

No quiso olvidarse de la subida a Carrasconte. “Esa que cuántas veces hemos hecho sin dormir. ¡Cuántas vivencias!. Y las que nos quedan porque este valle nos tiene que durar mucho“, exclamaba González al tiempo que hacía hincapié en el hecho de que en Laciana “todos nos conocemos. ¡Qué gusto da eso!. Vayas donde vayas tienes conversación. Esto es lo que yo llamo casa con mayúsculas”.

En su discurso también tuvo un hueco para las confesiones. Reconoció que cuando comenzó a valorar de verdad los paisajes del valle, fue el primer año que vivió en Madrid. “No sabes lo que tienes hasta que lo pierdes. En la capital hay verde y ríos pero que me perdonen los madrileños, nada que ver con este valle”. Por todo esto, animó a los lacianiegos a ser los primeros en “apreciar, valorar y admirar lo que tenemos”.

De la huella minera también habló. “La historia de este valle estará marcada por la mina. Por los buenos momentos que nos ha dado. Y los malos”. Recordó la marcha minera. “Tenía cinco años pero no lo olvido y aún se me pone el vello de punta cuando veo imágenes”. La minería “lo fue todo y le debemos tanto… lástima que ya no cuenta con la llamada del futuro”. Por eso apeló a buscar “una inyección por donde sea, porque bastante hemos perdido”.

También tuvo palabras para esos jóvenes que se han tenido que ir de la comarca. “Son generaciones perdidas que difícilmente se van a asentar aquí. Pero desde nuestro papel también podemos ayudar hablando a todos nuestros amigos de este valle, de estos montes…Será por encanto y rincones para explorar”. Para Giovanna González, ser lacianiega, es “un orgullo” y por eso pasea el nombre de Villablino allá por donde va.