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La Junta informa, un año más, a todos los ciudadanos de que, en el caso de observar un ejemplar de oso pardo en zonas urbanas o periurbanas, den aviso inmediato al teléfono 987 226 917 para dar traslado al personal especializado que a la mayor brevedad atenderá la situación para monitorizar y, en su caso, aplicar medidas aversivas.
Estas medidas aversivas o de condicionamiento negativo se enmarcan en el protocolo de intervención con osos en la Cordillera Cantábrica, aprobado por la Comisión Estatal de Patrimonio Natural y Biodiversidad el 24 de enero de 2019. Además, se están llevando a cabo de forma coordinada con la colaboración de la Guardia Civil.
Desde hace ya algunos años, en la Cordillera Cantábrica se repiten de forma más o menos recurrente episodios en los que los osos pardos se aproximan a los entornos urbanos o periurbanos para aprovechar recursos tróficos de origen humano: unas veces frutales, otras colmenas, contenedores de basura, alguna cabeza de ganado, pienso para perros o terneros, etc.
El oso pardo en zonas urbanas
Todos los episodios registrados de osos accediendo a recursos de carácter antrópico son, según la nota de prensa emitida por la administración autonómica, monitorizados por parte de agentes medioambientales, celadores de medio ambiente y Patrullas Oso de la Fundación del Patrimonio Natural de la Junta de Castilla y León, de forma coordinada con la Guardia Civil, e interviniendo mediante el condicionamiento negativo cuando es requerido.
Durante el año 2020 tuvieron lugar varios episodios en los que, tal y como revela el escrito, se actuó aplicando medidas aversivas sobre ejemplares de oso pardo. En las últimas semanas de este año se han establecido, según informa la Junta, dispositivos específicos de vigilancia y seguimiento por parte de los agentes medioambientales, celadores y Patrullas Oso de la Junta de Castilla y León ante observaciones recientes de ejemplares de oso pardo en el entorno de los pueblos de Laciana y Alto Sil.
Por ello, la Consejería de Fomento y Medio Ambiente reitera a la población la importancia de dar un aviso temprano, ya que si se tiene conocimiento rápido de estas observaciones y se aplican las medidas adecuadas no hay habituación. Para ello se pone a disposición de todos los ciudadanos el teléfono 987 226 917, atendido 24 horas al día y que, ante un aviso de la presencia de un oso en las proximidades de un núcleo urbano, se dará traslado al personal especializado, que a la mayor brevedad atenderá la situación para monitorizar y aplicar medidas aversivas.
