La segunda apertura estival de remontes en la provincia de León, que este año se ha circunscrito a la estación de esquí de Valle Laciana-Leitariegos (Villablino), se ha saldado con 656 usuarios, frente a los 571 de 2022, en el que también participó San Isidro (Puebla de Lillo). La Diputación, titular de las instalaciones invernales, puso en marcha los fines de semana y festivos de julio y agosto esta experiencia con el objetivo de promover actividades de ocio complementarias a los deportes de invierno, desestacionalizar estos complejos y dinamizar la economía de sus áreas de influencia.
Una avería eléctrica provocada por las tormentas obligó a suspender la apertura prevista del remonte de San Isidro ya que los plazos de entrega para la sustitución de los componentes electrónicos averiados en el telesilla de Cebolledo se extienden hasta septiembre.
La estación lacianiega ha permanecido abierta al público los fines de semana y festivos nacionales desde el 15 de julio al 27 de agosto, sumando 15 días y un promedio de 44 visitantes por jornada (28 en julio y 54 en agosto). El mes de mayor afluencia ha sido agosto, con 487 usuarios, frente a los 196 de julio. El 20 de agosto ha sido el día que concentró más asistentes: 102.
Respecto a la temporada pasada, en la que la estación de Valle Laciana-Leitariegos contabilizó 309 visitantes, ha habido un incremento del 113 por ciento. Teniendo en cuenta que el verano pasado el mes de julio no se abrió, la comparativa con el mes de agosto deja un incremento del 58 por ciento de usuarios.
La procedencia de las visitas ha sido muy variada, mayoritariamente de la provincia de León (138), seguida de Madrid (137) y Cataluña (70). El resto de las provincias de la comunidad han sumado 52 usuarios y también destacan los casos de Asturias (49), Comunidad Valenciana (44), Andalucía (37) o Galicia (34). Ha habido también un dos por ciento de visitantes de otros países: Dinamarca (4), Francia (cuatro), Alemania (tres) y Estados Unidos (dos).
La mayoría de las personas han aprovechado su visita para realizar la ruta a la Laguna de Leitariegos, de origen glaciar. Se trata de un recorrido sencillo de, aproximadamente, un kilómetro desde el desembarco de la silla y que cuenta con un merendero. Durante el paseo es frecuente avistar rebecos y otros animales de alta montaña. Además, es posible observar la flora característica de estos espacios.
La meteorología ha sido favorable para esta actividad 10 de los 15 días de apertura, con tiempo soleado o con algún intervalo nuboso y con temperaturas elevadas pero agradables, sin llegar al calor extremo que ha caracterizado este verano. Los cinco días de meteorología más desfavorable, con lluvia, niebla o viento, se han reflejado en una merma de las personas que se han acercado a este enclave turístico, señalan desde la institución provincial.