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Antonia Menéndez -92 años- y Salvador Fernández -90 años- son dos vecinos del valle, incondicionales de las instalaciones del polideportivo municipal. Ella nada, cada verano, en la piscina de Villablino. Lo lleva haciendo desde los años 80. No falta ni un día. Da igual si hace más o menos calor. El resto del año es habitual de las clases de gimnasia. Él es usuario del gimnasio, desde su jubilación en el año 2000. Entrenamientos que compagina con sus rutas de montaña.
Y precisamente porque día tras día son ejemplo de constancia y superación, el Ayuntamiento de Villablino les ha rendido este viernes un cálido homenaje en las piscinas municipales. Allí recibieron una placa honorífica, “por ser modelo para todos los compañeros de fatigas de las instalaciones deportivas”. Además, el edil de Deportes, Jose Saavedra, propondrá su nombramiento como socios honoríficos del polideportivo, petición que ha de ser sometida a la votación del Pleno de la Corporación Municipal.
Durante el sencillo homenaje, muchas fueron las palabras de cariño para Antonia y Salvador. El alcalde, Mario Rivas, defendió que son “un ejemplo para todos nosotros y representan la vitalidad de quien quiere vivir plenamente. Tenemos que aprender de ellos”. Ya no solo porque participan día a día en las actividades deportivas, sino que con ambos “se pueden compartir ratos muy agradables de conversación”. “Tenéis que sentiros orgullosos de este homenaje, que viene de la gente que os quiere y está en vuestra vida”, confesó el primer edil. Porque al acto no faltaron familiares, amigos y compañeros.
En la misma línea se pronunció, Ana Marentes, monitora del polideportivo, quien recordó que las flores y los honores han de darse en vida, como su abuela decía. Respecto a los homenajeados defendió que “son inspiración de muchos y envidia sana de otros” y destacó “la capacidad mental de ambos” para superar sus dolencias. Son, continuó diciendo, “dos personas entrañables, cariñosas y amables, admirables por su tesón y pasión por el deporte”.
Al homenaje se sumó Kevin Cepeda, socorrista de las piscinas municipales desde hace cinco años. Para él son el modelo perfecto de vida saludable. Confesó sentir admiración por Antonia y Salvador ya que transmiten “las ganas de hacer ejercicio y mantenerse saludable”, superando los noventa años de edad. Han conseguido, “que los mayores de setenta practiquen deporte y han impulsado la actividad deportiva en el valle“, terminó diciendo.
Antonia y Salvador son muy queridos en la comarca de Laciana porque cumplen, a la perfección, la expresión en latín clásico ‘Mens sana in corpore sano’. ¡Felicidades!.
