El desmantelamiento del lavadero de carbón, emblema de la minería de Laciana

Es uno de los vestigios mineros por excelencia de la comarca, el lavadero de carbón de Villablino que desde hace ya semanas está sufriendo el desmantelamiento del maltrecho sector, algo por otra parte totalmente previsible porque hay que recordar que es uno de esos activos mineros que entró en proceso de liquidación bajo la tutela de la administración concursal de Coto Minero Cantábrico por lo que las instalaciones fueron vendidas a una empresa adjudicataria.

Un desmantelamiento que fue paralizado el pasado mes de octubre por el propio alcalde de Villablino, Mario Rivas ya que la adjudicataria carecía de proyecto de demolición y de la pertinente licencia urbanística, tal y como ha recordado el regidor, quien a la vez ha admitido que semanas atrás “la empresa presentó ese proyecto y tiene en regla todos los permisos necesarios para la demolición”.

Aún así, Rivas ha manifestado su tristeza porque “vemos como una infraestructura emblemática del municipio está sufriendo la consecuencia de la inactividad minera, es una edificación histórica correspondiente a una época a la que tenemos que estar muy agradecidos”. Y es que el achatarramiento de las estructuras de acero será, tal y como ha avanzado el regidor, íntegro, es decir, se intervendrá en todas y cada una de las instalaciones del viejo lavadero de carbón que finalmente se verá reducido a la nada. De hecho, desde semanas atrás son varias las empresas que se han dejado ver por el lugar y están procediendo a las labores de desmantelamiento. Son Clemente Román S.L -Segovia-, Reciclados Bendición S.L -Asturias- y el grupo Redena -Vizcaya-.

De todas formas, el primer edil ha querido aclarar y subrayar que “nada, absolutamente nada del patrimonio minero que existe en el municipio ha revertido al ámbito público, por tanto está en manos de una administración concursal”. En este sentido ha querido recordar que los terrenos “a día de hoy siguen siendo propiedad de los concursales de Coto Minero Cantábrico”.

Y precisamente para este espacio existen dos planes turísticos; el de la plataforma ciudadana ‘Leitariegos Existe‘ que proyecta la creación de un centro de multiaventura  y el de ‘Crece Laciana’ que planea la construcción de un centro de ocio con aquapark incluido, tanto de invierno como de verano. Rivas también se ha referido a ambos planes y ha afirmado que espera y desea que fructifiquen y puedan salir adelante.

El lavadero

Y así poco a poco y pedazo a pedazo se va cayendo parte de la historia minera de Laciana. Hay que recordar que fue allá por el año 1989, aproximadamente, cuando la antigua junta directiva de la empresa Minero Siderúrgica de Ponferrada (antes de la llegada de Victorino Alonso) decidía iniciar su construcción. Una infraestructura que contaba con un presupuesto inicial de más de dos mil millones de las antiguas pesetas y que finalmente alcanzó un desembolso de cuatro mil millones.