Con un presupuesto de 100.000 euros, este proyecto supone una apuesta decidida por mejorar las instalaciones deportivas del municipio, alineándose además con los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030.
Las obras han incluido el reacondicionamiento completo del revestimiento interior del vaso de la piscina, así como la renovación del sistema de desagües y la instalación de un nuevo sistema de filtración de agua. Estas mejoras no solo aportan una modernización técnica evidente, sino que están diseñadas para hacer de la piscina un espacio más eficiente, sostenible y seguro para sus usuarios.
Desde el Ayuntamiento subrayan que esta intervención se enmarca especialmente en el cumplimiento de dos objetivos de la Agenda 2030: el Objetivo nº 3, “Salud y Bienestar”, y el Objetivo nº 6, “Agua Limpia y Saneamiento”. En relación al primero, la actuación responde a la necesidad de fomentar el deporte y los hábitos de vida saludables, así como el uso de espacios deportivos que sean educativos e inclusivos para toda la población, especialmente los jóvenes.
Por otro lado, el nuevo sistema de filtración representa un avance significativo en términos medioambientales. Su instalación permitirá un tratamiento del agua más eficiente, reduciendo el consumo excesivo y minimizando el riesgo de contaminación de este recurso esencial. La medida también se alinea con la creciente preocupación social y política por la gestión responsable del agua, especialmente en un entorno como el Valle de Laciana, donde la protección de los recursos naturales es un pilar fundamental.
Con esta actuación, el gobierno municipal de Villablino reafirma su compromiso con la mejora de las infraestructuras locales y la sostenibilidad ambiental, en un contexto donde las inversiones públicas deben responder tanto a las necesidades del presente como a los desafíos del futuro. Aunque bien es cierto, que la piscina municipal de Caboalles de Arriba sigue sin reparase y cerrada desde hace años. El equipo de gobierno ha manifestado su intención de seguir trabajando en esta línea, promoviendo proyectos que no solo beneficien a la ciudadanía en su día a día, sino que también construyan un modelo de municipio más resiliente, moderno y respetuoso con el entorno.
El resultado de la intervención ya es visible y ha sido bien recibido por los usuarios habituales de la piscina municipal, que podrán disfrutar en la próxima temporada de baño de unas instalaciones renovadas, más eficientes y adaptadas a los estándares de calidad y sostenibilidad exigidos en el siglo XXI.