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El Ayuntamiento de Villablino ha sido uno de los 130 Consistorios de toda la provincia que ha trasladado ya a la Diputación de León la necesidad de poner en marcha en la comarca una planta de transferencia de residuos de demolición con el fin de que el municipio cuente con esta área habilitada que permitirá una gestión adecuada de los escombros. Y es que tal y como ha reconocido el alcalde socialista de Villablino, Mario Rivas, “es importante contar con la planta de transferencia de escombros por la carencia que presenta el municipio respecto a este servicio”. A la vez el regidor ha manifestado que serviría para “evitar los vertidos ilegales”. Además, el alcalde ha anunciado ya que se ha pensado en el polígono industrial de Villager de Laciana como una posible ubicación para la planta de transferencia.
La solicitud de este servicio a la Diputación de León nace en el seno del Plan Provincial de Residuos Inertes impulsado por dicha institución con el fin de que todos los ayuntamientos de menos de 20.000 habitantes y que así lo deseen tengan áreas habilitadas para gestionar los escombros adecuadamente. De hecho, la Diputación financiará al 90% la construcción de cada una de las plantas de transferencia.
Precisamente, las bases de la convocatoria de la subvención se publicarán en el Boletín Oficial de la Provincia (BOP) a mediados del mes de enero. Es más, Juan Martínez Majo, presidente de la Diputación, ya ha avanzado que se prevé tener ejecutadas todas las instalaciones, unas 250, antes del 30 de noviembre. Y es que según ha remarcado Majo “queremos dar una solución a los ayuntamientos para preservar el medio ambiente evitando la proliferación de escombreras con los residuos que se generan en las pequeñas construcciones y demoliciones”.
El presidente recordó además que este año la institución cuenta con una dotación de 3,92 millones de euros para ejecutar dicho Plan Provincial de Residuos Inertes. Dotado con 10 millones de euros para tres años, se enmarca dentro del convenio que la Diputación de León firmará a lo largo de enero con la Consejería de Fomento y Medio Ambiente, que se encargará del sellado y restauración de las escombreras existentes, tal y como aprobó recientemente el Consejo de Gobierno de la Junta.
De esta forma, la Diputación de León aportará para la ejecución de cada una de las plantas de transferencia el 90 por ciento del presupuesto total -hasta un máximo de 10.000 euros-, por lo que los ayuntamientos tendrán que sufragar el diez por ciento restante. Una de las condiciones que se exige a los ayuntamientos es que el punto de tratamiento de residuos esté ubicado en un lugar viable urbanísticamente, al tiempo que se establecen unos requisitos mínimos como una superficie de 130 metros cuadrados para ubicación de los contenedores, una valla perimetral, una puerta de acceso de vehículos con cinco metros de anchura y un cartel de normas para el uso de la instalación.
